Puedes plantearte el Camino de Santiago como una
forma de ir de vacaciones, como una forma de hacer deporte, como una ruta
gastronómica, como otra forma de ir de juerga, pero así nunca sabrás lo que es hacer el
Camino.
Roberto nos comentaba que en una reunión de
hospitaleros hablaban así a los futuros peregrinos: sabéis que vais a sufrir,
que os van a doler los pies, que probablemente os salgan ampollas, que os
llueva mucho y os pongáis de barro hasta los pelos, que puede que incluso
paséis hambre, tengáis que dormir en el suelo o al raso, o no dormir, no tendréis
cobertura con el móvil, ni televisión, ni comodidades, y aun así, tenéis la
firme convicción de seguir adelante, y encima felices, ¡¡¡estáis locos!!! Pero
adelante, porque será una experiencia inolvidable.
Para mí, el camino ha estado íntimamente ligado a
mi mochila, a dormir en los albergues, a la soledad del camino, al especial
compañerismo entre la gente con la que me he relacionado, al menú del día, a la
búsqueda de las flechas amarillas, al ritmo de mis propios pasos, a mis
pequeños y grandes dolores…me parece que sin todo esto el camino no es el camino.
Ha sido la superación de un reto personal.
Ya sé que hay muchas otras formas de hacer el
camino, y que a veces no todo el mundo, por muchas circunstancias, lo puede
hacer así. Pero la satisfacción que te da hacer el camino andando, con tu
mochila al hombro, levantándote cada día sin otro objetivo más que caminar, sin
preocupaciones, sufriendo el camino, creo que no tiene punto de comparación. El
dolor es compensado por la belleza del paisaje, las nubes, los árboles, los
arroyos, las risas, esos trozos de camino que solo a tus ojos son mágicos.
Ahora, en la ciudad, me siento diferente, veo las
cosas desde otra perspectiva, con otra escala de valores, menos materialista,
porque en el Camino te das cuenta que
para ser feliz hacen falta muy poquitas cosas. Hacer el Camino Primitivo ha
sido una experiencia muy enriquecedora y que le recomiendo a cualquiera que me pregunte.
Mejor no se podía haber explicado qué es el Camino de Santiago.Subrayo la frase "para ser feliz hacen falta muy pocas cosas"
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